El plan B de los globalistas
Por Aleksandr Duguin

Los globalistas se han puesto mucho más activos antes del cambio de administración en Washington. Ha comenzado el Plan B.

Mientras puedan, intentan golpear a Rusia en todos los frentes: Moldavia, Georgia, Abjasia, Siria e incluso se anula (por si acaso) la victoria accidental del conservador Georgescu en las elecciones en Rumania. Están tratando de darle a Zelensky el máximo apoyo y están presionando directamente a los países de la UE hacia una confrontación directa con Rusia.

El Plan A era un escenario más fluido, que habría entrado en vigor si Harris hubiera ganado. Y ahora el plan B es un plan para una escalada aguda, extremadamente aguda. Las cosas solo se van a calentar hasta el día de la toma de posesión de Trump. Además, los globalistas están tratando de hacer que sea imposible, incluso bajo Trump, desviarse del camino de la escalada. Están intentando convertirlo en rehén de una gran guerra contra Rusia. De esto se trata el plan B.

Tenemos una pequeña cantidad de posibles respuestas a todo esto. Lo más correcto en tal situación sería concentrarse y avanzar obstinadamente hacia Kiev, sin prestar atención a nada. Y acelerar las reformas internas: ya están en marcha, pero están actualmente estancadas en varios ámbitos. Empezar a dudar y tratar de llegar de alguna manera a un acuerdo con el enemigo en tales condiciones es un suicidio y una admisión de derrota. Nadie hará esto. Pero definitivamente es necesaria la aceleración de las reformas patrióticas.

Editorial de Nuestra América.

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